Zulema nació en una zona rural donde estuvo internada en un colegio de hermanas religiosas hasta recibirse de maestra. Un día conoció a Natty y desde ese momento, motivada fundamentalmente por las enseñanzas de Natty,  se integró al grupo Los del Camino. Sus hijas, en ese entonces adolescentes, fueron las primeras en sumarse a esta misión de amor, ya que la tarea de Natty satisfacía todas las esperanzas e ilusiones de ser mejores personas y de contribuir para un mundo mejor. 

Zulema se unió al grupo de Natty, al  mismo tiempo que atendía a su familia y daba clases en una escuela primaria. En 1987 fue tan grande su deseo de estar junto a Natty y ayudarla en su misión, que Zulema finalmente decidió dejar su trabajo pago, para unirse de forma definitiva a Natty y así trabajar tiempo completo en el Hogar Peregrino San Francisco de Asís. 

Zulema cita” “…disfrutando de la generosidad de Natty, que compartía su energía maravillosa y crística, era fácil estar al lado de ella. Quiero seguir con el grupo Los del Camino, irradiando generosidad y mucha ayuda a los más necesitados, para seguir llevando a los desiertos y selvas de la Argentina nuestra ayuda humanitaria”